Gustavo Alem y Caterina Stanton abrieron la panadería en junio de 2020 y han sido bien acogidos por los vecinos.    | Pere Bergas

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«Bonaire es un barrio tradicional. Al principio los vecinos se acercaban escépticos, y ahora son los primeros en llegar porque a mediodía no queda del pan que les gusta», explica Caterina Stanton que, junto a su marido y socio Gustavo Alem, en junio de 2020 abrieron el obrador Uco Bakery, en el que elaboran pan con masa madre de larga fermentación.

«Siempre cuento que Uco es una historia de amor. Soy intolerante al gluten. Al mudarnos a Mendoza, en Argentina, no había nada de lo que solía consumir. Entonces él aprendió a preparar pan de masa madre en su tiempo libre», explica Cate, y Gus añade: «Queremos promover una alimentación más consciente, con productos de calidad y respetando los tiempos naturales. Con una fermentación de 30 horas en masa madre logramos un pan más saludable, más fácil de digerir y un sabor único».

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En Uco elaboran más de una docena de panes distintos.

Nombre propio

Otro objetivo es darle un    ‘nombre propio' a todos sus productos, por ello apuestan por ingredientes ecológicos de la Isla, desde la harina de algarroba, xeixa, o centeno, los frutos secos, hasta la sal marina de Es Trenc, el aceite de Son Moragues o el agua de la Serra de Tramuntana. «Nos sorprendió todo lo que se produce en la Isla. Generamos sentimiento de comunidad, conocemos el origen de nuestros ingredientes y se potencia la labor del pequeño agricultor». En su catálogo cuentan con más de una docena de panes, que renuevan con el tiempo. Los más demandados son el clásico Sourdough, con harina de xeixa, agua y sal; su versión integral, y el pan de harina de maíz morado con pistachos y dátiles.