Una de las pasiones del artista mallorquín es la cocina.

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Una amistad de más de 14 años entre dos amigos como el pintor mallorquín Domingo Zapata y el actor y director de cine Jordi Mollà, ambos reconocidos internacionalmente, será llevada a la pequeña pantalla en un documental. El trabajo televisivo se está rodando en Palma durante los últimos días, tras hacerlo en Los Ángeles, Miami, Nueva York, Roma y Madrid. «No podía faltar Mallorca», desvelaba Zapata, quien siempre ha llevado el nombre de su tierra natal por todo el mundo.

El documental se titulará Dos amigos, un pincel y una paella y presumiblemente se podrá ver a través de una plataforma digital, aún por desvelar. Anteayer, el equipo de producción y los dos protagonistas subieron a bordo del Odyssey III, un precioso barco de época y pusieron rumbo a la bahía de Palma, donde grabaron mientras elaboraban una deliciosa paella de marisco.

Amante de la cocina

Conocido por sus pinturas y grandes murales en todo el mundo, Domingo Zapata es un auténtico apasionado de la cocina y eso se reflejará en el documental, en esta ocasión haciendo una de sus especialidades, la paella. Por el contrario, a Mollà se le da mejor observar como su amigo del alma prepara el arroz. También hay que reconocer que su paladar en más selecto al igual que en las raciones a la hora de emplatar, donde Zapata además de ponerse más, repite. Fue una paella cocinada a fuego lento, como el ritmo que marcó el Odyssey III, en aguas de la bahía de Palma. Es un yate clásico construido en 1967, de 33 metros y cuatro camarotes, con todo tipo de lujos y entretenimiento náutico. El alquiler de su precio en temporada alta roza los 60.000 euros por semana.

Zapata y Mollà comparten risas y mucha diversión, cuentan como se conocieron, los recuerdos y sus viajes por medio mundo. En el rodaje a bordo de la embarcación no faltó la música flamenca a toque de guitarra y palmas. El café se acompañó con una copa de licor de hierbas y ensaimada de crema quemada.

Algunas calles y locales emblemáticos de Palma también son escenarios del documental, Dos amigos, un pincel y una paella, mientras pasean o charlan en una cafetería. La grabación que coincide con las vacaciones en la Isla que ambos disfrutan en compañía de otros amigos y que reflejan la buena sintonía que les une desde que se conocieron.

Dos amigos con mucho arte

El documental descubre cómo y dónde se conocieron y, aunque se conoce poco de sus vidas privadas, ambos destacan profesionalmente. El actor y director de cine Jordi Mollà ha obtenido cuatro Goyas como mejor interpretación en los años 1997, 1998, 2000 y 2010, además de otros galardones. Ahora, también, destaca en la pintura, como su amigo Zapata.