España pidió ayer que los fondos europeos de ayuda a las inundaciones se amplíen a las sequías e incendios forestales y obtuvo el respaldo de un amplio grupo de países, según dijo a la Agencia EFE la ministra española de Medio Ambiente, Cristina Narbona.
En el consejo informal de ministros europeos de medio ambiente que se celebra ayer en Lisboa, España presentó además su propuesta de albergar en Barcelona un centro europeo para la sequía y la desertificación que, agregó Narbona, fue igualmente bien valorado y respaldado de forma explícita por «bastantes países».
La reunión de la capital portuguesa giró en torno al tema central de la sequía y, a propuesta española respaldada por Portugal, se debatió la posibilidad de que el fondo de solidaridad creado para las inundaciones abarque también esos fenómenos.
«Varios países han subrayado su importancia, no solo en materia de sequía sino también de incendios forestales», explicó Narbona, que destacó la «experiencia viva» que en esa materia aportó Grecia y las muestras de solidaridad que recibió en la reunión.
«Me parece que se va por buen camino», indicó Narbona, aunque «como es lógico en una comunidad de 27 miembros, hay países a los que el tema de la sequía todavía -subrayó- no les importa».
Narbona recordó que éste es un Consejo informal pero España trabajará con Portugal, que preside este semestre la UE, «para intentar que la riqueza del debate se traduzca en el Consejo formal de octubre en una propuesta de conclusión».
Fuentes de la conferencia dijeron a EFE que en el sur de Europa y entre los países más poblados, como Francia, Reino Unido o Alemania, hubo gran sensibilidad hacia las tesis de España y Portugal, aunque en las naciones del norte se apreció reticencia a respaldar medidas que puedan traducirse en nuevas cargas financieras.
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