TW
0

Las familias se encargan de llevar en sus vehículos a los ingresados de la residencia Can Blau al hospital Can Misses cuando sufren algún tipo de problema. La razón argumentada para que las familias se hagan cargo del transporte es que «no hay personal», según aseguraron los allegados que han ido revelando más datos acerca de la atención a los ingresados en la residencia de Santa Eulària. Una de las familias ha optado por prescindir de los servicios de la residencia y trasladarlo a Cas Serres para que sea atendido. Otras tres personas ingresadas en la residencia han sufrido deshidratación, según reveló ayer la consellera del Pacte, Patricia Abascal.

El jueves hubo una reunión de las familias que han pedido que la residencia sea gestionada por el Consell, ya que «se le han dado varias oportunidades a la empresa y desconfiamos», aseguraron. No obstante, las familias volvieron ayer a tener una reunión con la empresa Aser. También se desplazaron ayer a Eivissa dos técnicos de la Dirección de Servicios Sociales de la Conselleria de Presidència del Govern para hacer una inspección, a petición del Consell, tras recibir tres denuncias por escrito de ingresados en el centro. La empresa también se ha dirigido a la Conselleria para que se examine el centro.