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El concejal de Urbanisme del Ajuntament de Alaior, arropado por la edil de Serveis Generals, Celia Osorio y la teniente de alcalde, Ignàsia Domenech, quiso ayer denunciar, documentos en mano, «las mentiras y las manipulaciones» de la portavoz del PP, Coia Sugrañes, respecto a las supuestas irregularidades que el regidor socialista hizo en su vivienda.

José Falagan quiso demostrar, en su propia casa, que él no ha hecho ninguna reforma en la vivienda desde que la adquirió en diciembre del 1995. Para ello recurrió a fotografías personales y familiares que demuestran que la vivienda que habita el edil «está igual que cuando la compré», asegurando que no se ha hecho ningún tipo de construcción, tal y como denuncia el PP.

Además, Falagan presentó la resolución del catastro de corrección de oficio de errores de derecho de la vivienda, fechado a 1 de enero de 1994, en el que ya se certifican las irregularidades que el PP atribuye al edil socialista. En el año 2001 se regularizó esta situación catastral, con efectos del 1 de enero de 1994, ya que el anterior propietario, según el PSOE no tenia regularizada esta situación, a pesar de tener la cédula de habitabilidad.

El concejal también recriminó a la portavoz popular de «manipular y tergiversar» el informe del Consell de Menorca, ya que al contrario de los que defiende Sugrañes, dicho informe destaca que la ampliación de la vivienda se produjo antes del 1995, cuando Falagan no era propietario de la casa. De hecho, aseguran que las obras fueron ejecutadas entre el 1992 y el 1993 por el anterior dueño. Precisamente, destacan los socialistas, en ese periodo Coia Sugrañes era la primer teniente de alcalde del Ajuntament de Alaior. Por todo ello, no entiende las fotografías aéreas de su vivienda filtrada a los medios de comunicación, que a su parecer no demuestran la supuesta ampliación que denuncia el Partido Popular.

El concejal socialista dijo sentirse dolido por «todos estos ataques personales, hacia mi y mi familia», a la vez que recordó que no ha sido imputado por ningún delito urbanístico.