Dos embarcaciones de la Guardia Civil trasladan a puerto a 352 inmigrantes detenidos en las costas de Tarifa.

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El Gobierno cree que las autoridades marroquíes son los únicos que pueden detener la presión de pateras ya que una vez que salen, lo único que se puede hacer es detenerlas y tratar de salvar la vida de las personas que están allí.

En las últimas horas González explicó que la Guardia Civil había interceptado 12 pateras; nueve en El Estrecho y 3 en Canarias, en las que más del 50 por ciento de los «pasajeros» eran marroquíes. Entre los interceptados hay varias embarazadas, bebés -uno de ellos de tan sólo dos semanas- y dos mujeres escayoladas por rotura de huesos.

El delegado del Gobierno para la Extranjería, Ignacio González, subrayó que se están interceptando pateras de apenas ocho metros de largo por dos de ancho en las que viajan casi 70 personas, lo que pone de manifiesto el grave riesgo en que ponen la vida a los inmigrantes esas redes.

«Hemos tenido una llegada importante de inmigrantes a través de embarcaciones irregulares, que se enmarca dentro de la presión migratoria creciente que hemos tenido en los últimos meses», comentó. En cualquier caso, aseguró que los detenidos serán repatriados. Así, señaló que los marroquíes serán repatriados en un plazo de 72 horas.

También afirmó que durante el día de ayer se producirían vuelos de repatriaciones de 250 extranjeros, no sólo de africanos sino también de rumanos. Mientras, los subsaharianos serán internados y, en lugar de aplicárseles la figura de la devolución, se les abrirá un expediente de expulsión.