Unas 150 personas participaron en la manifestación contra la inmigración.

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EUROPA PRESS-CUENCA El acto duró una media hora y en él se dieron cita unos 150 vecinos de esta localidad conquense, en su mayoría más por curiosidad que por seguir el discurso pronunciado por el representante de Democracia Nacional. El portavoz parlamentario del PSOE, Jesús Caldera, anunció ayer que su partido ha presentado un recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha para evitar que el Gobierno permita manifestaciones anti-inmigración.

Caldera explicó que esta resolución debe servir para sentar «precedentes en la jurisprudencia» que eviten que otras manifestaciones como ésta no tengan lugar. Asimismo, Caldera pidió la comparecencia «urgente» en el Congreso del vicepresidente primero y ministro del Interior, Mariano Rajoy, para explicar por qué la Subdelegación del Gobierno en Cuenca ha permitido la celebración de una manifestación «claramente racista» por parte de un partido de extrema derecha.

En su opinión, el ministro ha «comprometido gravemente su talante» al autorizar una manifestación «racista y discriminatoria». Al igual que el PSOE, IU anunció que pedirá la comparecencia en el Congreso de Rajoy para que aclare por qué se ha autorizado la manifestación en Las Pedroñeras (Cuenca), ya que «actuaciones de este tipo sólo pueden entenderse como un respaldo pasivo a esta exaltación del racismo y xenofobia».

Por su parte, el alcalde de Las Pedroñeras, Rafael Ruiz Araque, declaró que no está de acuerdo con la decisión del subdelegado del Gobierno en Cuenca, Manuel Horrillo, de autorizar esta concentración. Igualmente, el Gobierno de Castilla-La Mancha expresó a la Delegación del Gobierno su inquietud por la convocatoria de una manifestación «de marcado tinte racista y xenófobo».