Más de medio centenar de inmigrantes ilegales han cruzado el
Estrecho a bordo de pateras en los últimos días, entre ellos varios
menores y una mujer embarazada. Si hasta la fecha los ilegales eran
en su inmensa mayoría magrebíes o de origen subsahariano, ahora hay
que añadir a filipinos.
Veinticinco inmigrantes de origen subsahariano fueron detenidos
la madrugada del lunes tras llegar a la costa sur de Fuerteventura
a bordo de dos pateras, una de las cuales resultó interceptada
cuando navegaba de regreso a mar abierto.
La patrullera de la Guardia Civil del Mar localizó sobre las
02.30 horas la primera patera, que ya había dejado en la costa a
los inmigrantes que transportaba, aunque sus dos patrones fueron
detenidos. Poco más tarde, en las inmediaciones de una playa de
Morro Jable, en el municipio de Pájara, agentes del instituto
armado hallaron y detuvieron a siete hombres, cuatro mujeres y un
menor de nacionalidad nigeriana, quienes confesaron que habían
arribado a la isla en la patera interceptada con anterioridad.
El segundo grupo de africanos, localizado sobre las 04.30 horas
en las inmediaciones del barranco de Los Canarios, también en
Pájara, estaba formado por seis inmigrantes de Nigeria y siete de
Sierra Leona.
Entre los nigerianos se contabilizaron dos menores y una
embarazada, que fue ingresada en el Hospital de Puerto del Rosario,
además de dos hombres y una mujer. Los inmigrantes originarios de
Sierra Leona eran cinco hombres y una mujer. Además, entre los
inmigrantes detenidos el domingo por la tarde tras llegar en patera
a la isla figuran cuatro filipinos, dos hombres y dos mujeres, dijo
la Guardia Civil. El grupo estaba formado por ocho inmigrantes de
Nigeria, uno menor de edad, y uno de sierra Leona, además de los
cuatro de Filipinas. La Guardia Civil precisó que los dos patrones
de la patera también fueron detenidos.
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