El Mercedes Clase G, pese al paso de los años, sigue siendo sin ninguna duda uno de los todoterreno más icónicos del sector de la automoción. | Mercedes-Benz / Communications & Marketing

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En el segmento de los todoterreno de lujo, la Clase G de Mercedes es sin duda un clásico que sigue disfrutando del reconocimiento del público y del privilegio de los que pueden comprarlo dado su elevadísimo precio. Y para seguir manteniendo este prestigio, la firma alemana ya tiene a punto una puesta al día que conllevará ligeros cambios estéticos, un equipamiento todavía más completo con la incorporación de nuevos elementos tecnológicos y la electrificación ligera de 48v incorporada a los potentes motores ya existentes. Y todo ello sin olvidar la versión 100 % eléctrica prevista para el futuro.

En esta ocasión, Mercedes mantiene el diseño exterior del vehículo sin apenas cambios. Tan solo algunas pequeñas modificaciones en la parrilla que ahora consta de 4 lamas, y un ligero rediseño de los parachoques delanteros y traseros. Al mismo tiempo, para mejorar tanto la aerodinámica como el confort acústico, se ha introducido un nuevo revestimiento, se ha modificado el spoiler en el borde del techo y se han incorporado nuevos materiales aislantes.

También se ofrece nuevas llantas de diferentes diseños con medidas que van de los 18 a 20» y a la vez un nuevo color azul sodalita de carrocería. Y si el cliente prefiere personalizar el vehículo a su gusto, la marca de las estrella ofrece diversas líneas como son la Professional Line, Exclusive Line y AMG Line para ello.

Sistema multimedia MBUX

En el interior si que encontramos algunos cambios más visibles. Comenzando por las salidas de aire laterales que adoptan la forma de los faros redondos del vehículo, disponibles con iluminación. Los interruptores de los tres bloqueos de diferencial siguen manteniendo su protagonismo en el centro de control todoterreno que ha sido rediseñado, y el volante multifunción de última generación con superficies de control táctiles está tapizado en napa de serie. Llama también la atención la consola central modificada que incluye un control táctil rediseñado para manejar el sistema multimedia MBUX de última generación, con dos pantallas de 12,3 pulgadas, asistencia por voz y conectividad inalámbrica para el smartphone vía Apple CarPlay o Android Auto disponible en todas las variantes del modelo. Otros elementos innovadores son la función Offroad Cockpit (muestra en la pantalla datos sobre la conducción todoterreno) y la ‘capó transparente’ que ofrece una vista virtual por debajo de la parte delantera del vehículo.

48 voltios

En cuanto a las motorizaciones, los cambios son importantes. Comenzando por la versión diésel, G450d, se mantiene el 6 cilindros de 3.0 al que se le ha introducido un sistema de hibridación ligera de 48v, lo qu le permite desarrollar ahora 367 cv.

El G 500 ha dejado de lado el anterior V8 para sustituirlo por un 6 cilindros en línea, también con electrificación ligera, ofreciendo ahora 449 cv. Finalmente, para los que quieren lo máximo, se mantiene la variante AMG 63 equipado con un V8 biturbo capaz de desarrollar 585 cv y con unas prestaciones espectaculares para un vehículo del peso de este gran TT. Y es que acelera de 0 a 100 km/h en apenas 4 segundos y es capaz de alcanzar los 220 km/h. Curiosamente, gracias a esta hibridación, la Clase G disfruta ahora de la calificación ECO de la DGT.

Transacción automática

Toda la gama viene equipada con un moderno sistema de transacción automática con convertidor de par 9G-Tronic, especialmente adaptada a las características y al rendimiento de este espectacular todoterreno. Incluye tres sensores de velocidad, que permiten en función de la conducción, saltar varias marchas para obtener el máximo rendimiento. Y por supuesto, se mantiene la posibilidad de efectuar los cambios de forma manual con las levas situadas en el volante.

El nuevo clase G sigue ofreciendo 4 tipos de conducción diferentes, modos de conducción, se puede elegir entre cuatro distintos: Confort, Sport, Eco e Individual. Y además, hay tres modos de conducción adicionales para la asistencia todoterreno específica en función de la superficie a superar con el vehículo (tierra, grava, rocas o arena).