El cachalote fue hallado entre Estellencs y Banyalbufar. | Fundación Palma Aquarium

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La Fundación Palma Aquarium, junto con Shark Med, ha alertado este jueves de la muerte de un cachalote a la deriva, que fue encontrado por un particular que llamó al 112 el pasado lunes, 29 de mayo, para avisar de que había avistado el cadáver del cetáceo en la costa norte de la Serra de Tramuntana, concretamente entre Estellencs y Banyalbufar.

El equipo de la Fundación Palma Aquarium, acompañados de Shark Med, acudieron al día siguiente en busca del animal para tomar medidas, algunas muestras y fotos. «Se hace normalmente en estas situaciones, para mejorar conocimientos de las especies y la salud», apunta la organización conservacionista en su cuenta de Instagram.

Tras la exploración in situ del animal, la asociación ha confirmado de que se trata de una cría de cachalote (Physeter macrocephalus) hembra. Normalmente, las crías de cachalote tienen al nacer de 3,5 a 4,5 metros de longitud y pesan alrededor de 1.000 kilos, y maman de sus madres entre dos y tres años. El cachalote habita en el Mediterráneo, sobre todo en la parte occidental, y en Baleares hay grupos estables. Los últimos cálculos realizados por la organizaciones conservacionista estiman a una colonia de unos 300 individuos cerca de la costa de las Islas.

Desde la Fundación Palma Aquarium recuerdan que en caso de encontrar un cetáceo muerto o vivo y en peligro, es de vital importancia llamar al 112 para que podamos proceder lo antes posible. Además, recomiendan no tocar a los animales en ninguno de los casos. «Los cetáceos, al ser mamíferos como el ser humano, tienden a transmitir con más facilidad enfermedades e infecciones. Entre las posibles enfermedades zoonóticas que puede transmitir un cetáceo están las siguientes: Brucelosis, salmonella, tuberculosis, dermatitis viral y bacteriana, leptospirosis, toxoplasmosis, etc.», alertan.

Esta actuación se ha realizado en el marco del proyecto de conservación y protección de especies marinas amenazadas (tortugas marinas, cetáceos y tiburones) en las Islas Baleares, apoyado por la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), financiado por los fondos Next Generation de la Unión Europea.