El mal estado del aljibe provocó hace unos años un hundimiento en la plaza.

TW
6

Caimari recuperará el aljibe construido en 1935 por el arquitecto José Alomar bajo la plaza del pueblo para almacenar el agua de lluvia con la idea de reutilizar el líquido para el riego de zonas verdes. La rehabilitación de la antigua infraestructura para el riego municipal forma parte del anteproyecto de reforma de la Plaça Major que el Ajuntament de Selva ha presentado a la convocatoria del Consorci Borsa d’Allotjaments Turístics. Tiene un coste previsto de 1.144.000 euros de los que 400.000 euros procederían de dicho fondo y el resto se sufragarían con fondos propios.

La reforma de la plaza (en superficie) y del aljibe subterráneo llega después de que el Consistorio se viera obligado hace unos años a apuntalar la plaza principal del pueblo que se hundió parcialmente al ceder el aljibe por problemas de conservación. El proyecto que ahora se plantea es obra del estudio Marès arquitectura paisatge territori, del arquitecto Jaume Lluís Salas, especialista en construcción sostenible. «La reforma de la plaza y el aljibe de Caimari tiene un fuerte componente turístico ya que Caimari es una de las puertas principales de la Serra de Tramuntana y la plaza es el espacio público más relevante del pueblo. Es, por tanto, con esta reforma tan necesaria una estrategia caudal en cuanto a la circularidad para mejorar el entorno patrimonial del pueblo hacia un futuro más sostenible», dice la propuesta.

El aljibe almacenará no solo las aguas pluviales de la plaza sino también la que procede de las cubiertas de la iglesia. Según las estimaciones permitirá reaprovechar 2.400.000 metros cúbicos de líquido al año. Por otra parte el proyecto de reforma de la plaza se plantea aprovechando recursos ya existentes (principalmente elementos de piedra) para minimizar su huella ambiental. Se eliminarán las barreras arquitectónicas y se dará preferencia a los viandantes en todo el entorno.