La nueva infraestructura educativa de Campos lleva más de diez años de retraso.

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Tras años de espera y reivindicaciones, la escuela nueva de Campos está más cerca. Una semana después que la junta de gobierno otorgara la licencia urbanística, por segunda vez, el Consell de Govern autorizó ayer la inversión de 6,9 millones de euros para la construcción del nuevo centro. La Conselleria de Educació, a través del Institut Balear d’Infraestructures educativas, ya puede licitar las obras.

El nuevo colegio tendrá una capacidad para acoger a 450 alumnos. Contará con seis aulas de educación infantil y 12 para educación primaria. El plazo de ejecución, una vez iniciadas las obras, es de 15 meses y este centro dará respuesta a las necesidades educativas del municipio. Desde hace años la construcción de esta nueva infraestructura ha estado perseguida por la polémica respecto a la ubicación. Desde el primer momento los padres y madres de los escolares se han movilizado para que esta escuela se construyera lo antes posible ya que los alumnos tienen que estudiar en aulas prefabricadas.

Según informan, desde Educació, el proyecto en su redactado inicial contó con las aportaciones de la comunidad educativa que fueron incorporadas propiciando una nueva distribución. Se reubicó el gimnasio favoreciendo la comunicación fluida entre los espacios y ampliando las zonas de patio y de ocio.

Sostenibilidad

El centro se construirá con los parámetros de sostenibilidad ecoambiental que marca la normativa del IBISEC y además contará con paredes móviles que permitirán el reagrupamiento de las aulas según las necesidades pedagógicas del centro.

El apunte

El proyecto permite la posibilidad de ampliaciones

El proyecto forma parte del Pla d’Infraestructures Educatives 2016-2023 impulsado para dar respuesta a las necesidades estructurales de los centros educativos. El proyecto contempla la posibilidad de futuras ampliaciones. Tendrá amplios patios y se mantendrán los elementos patrimoniales del solar