Ambiente festivo. La ilusión acompañó a los vecinos y visitantes a la feria que después de tantos meses de restricciones tienen ganas de pasear por las ferias, dejando atrás los confinamientos vividos. Hubo una amplia oferta y toda clase de productos para comprar además de los relacionados con la temática de la feria.

TW
0

Felanitx aprovechó la Fira del Pebre Bord para volver a dar a conocer todo su potencial comercial, industrial y social a los centenares de personas llegadas de toda la Isla que este domingo se pasearon por los más de tres kilómetros de recorrido ferial, con más de 350 puestos de venta o exposición por las calles del centro. El típico Pebre Bord (pimentón) que da nombre a esta ancestral feria, aunque de forma testimonial, tuvo su protagonismo. En los últimos años ha crecido el número de productores que lo siembran, principalmente en las tierras del llogaret de Son Mesquida.

Embutidos

Ahora que empieza la temporada de las matanzas, el pimentón molido fue un producto muy demandado. También los embutidos elaborados en Felanitx donde antaño había muchas empresas que se dedicaban a la matanza. Sobrasada, botifarrons, longaniza, camaiot o paté fueron los más vendidos. También había vinos felanitxers y de la DOP Pla i Llevant, ahora en auge y muy solicitados. Muy visitadas estuvieron también las carpas de la muestra de los industriales, artesanos y entidades sociales del municipio que aprovecharon para enseñar el trabajo que realizan, todo para dar un impulso al producto local.

Durante el recorrido había muestra de animales autóctonos, de coches y motos antiguas, de ca de bestiar, de bordados mallorquines y randa de macetes, demostraciones de los perros pastores guiando a las ocas, un taller de baile en línea, la exhibición de pilotaje de motos, así como actividades infantiles, y una Batucada recorrió todo el itinerario.