La voluntad del equipo de gobierno es priorizar el departamento de Serveis Socials, reforzando la plantilla de trabajadores familiares y ayudar en lo posible a las familias más vulnerables. Las concejalías ‘sacrificadas’ y que aportan dinero al fondo son Festes i Joventut con 225.000 euros; Cultura, 99.000 euros; Medi Ambient, 58.000 euros; y Seguretat Ciutadana que aporta 40.000 euros. La finalidad de este fondo es «minimizar las consecuencias económicas que tendrán las familias más vulnerables en los próximos meses. Tampoco dejaremos de lado a las empresas que se han visto obligadas a cerrar sus negocios, muchos de ellos gestionados por autónomos que con el cierre se han quedado sin ingresos», apunta el alcalde, Jaume Monserrat.
En este sentido, en cuanto a medidas fiscales, el Ajuntament estudia aplazar o suspender algunos impuestos o tasas a los negocios obligados a cerrar, como puede ser la ocupación de la vía pública de las terrazas de los bares. También está valorando ofrecer subvenciones a los comercios locales para dinamizar la economía.
A todo este paquete de medidas fiscales y sociales se le pueden añadir más presupuesto en las próximas semanas.
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