Los niños y sus familias han protestado frente a la sede del Ajuntament de Manacor. | Assumpta Bassa

TW
1

Los alumnos de Manacor están cansados de esperar. Este viernes un centenar de padres y niños han cambiado las aulas por una cacerolada frente al Ajuntament de Manacor para protestar por la demora en las obras de la escuela nueva de sa Torre.

Después de la concentración frente a la sede del consistorio manacorí, a la cual se han sumado el propio alcalde de Manacor, Miquel Oliver, y el regidor de Educació Mateu Marcé.

Los padres han iniciado un ciclo de manifestaciones y cada mes se concentrarán frente al Ajuntamernt hasta que entre el proyecto.

En un manifiesto recuerdan que en octubre de 2018 se cerró la escuela por orden de la Conselleria d'Educació ante la presencia de termitas. «Se nos informó de que debíamos abandonar el centro y se debía acelerar su reforma de forma urgente y extraordinaria. Nos aseguraron que el curso 2019/20 regresaríamos a nuestra escuela. Han pasado quince meses y el proyecto de obras todavía no se ha acabado de redactar. ¿Qué pasa con las promesas? No tenemos escuela, los niños se merecen un espacio adecuado, propio, donde poder jugar y correr libres», denuncia el citado manifiesto.