El paseo de Cala Gat, en Cala Rajada, destrozado por el temporal. | Redacción

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Daños millonarios en equipamientos, infraestructuras públicas y en viviendas particulares en toda la costa del Llevant. Desde Cala Rajada en Capdepera hasta Cala Llombards en Santanyí se repite la misma situación, playas, paseos, embarcaciones o casas dañadas por el temporal marítimo provocado por la borrasca ?Gloria?.

En Cala Rajada, tanto el paseo de Cala Gat como el paseo marítimo son intransitables. El temporal los ha partido por la mitad en algunos de sus tramos. En otros ha provocado enormes socavones. La misma situación se repite en la playa de Son Moll. Rafel Fernández, alcalde de Capdepera, manifestaba que «sin tener los informes técnicos y en una valoración muy superficial podemos estar hablando de unos dos o tres millones de euros para reponer todos los daños». En el muelle algunos de los barcos sufrieron desperfectos y otras embarcaciones se hundieron.

En Cala Rajada, como en otros puntos de la costa del Llevant, los técnicos de la Demarcación de Costas realizaban ayer las primeras valoraciones. Tanto el conseller insular de Promoció Económica i Desenvolupament Local, Jaume Alzamora, como el delegado del Gobierno, Ramón Morey, se acercaron a distintos puntos de la costa afectados.

Intervención

En el paseo marítimo de Cala Millor no se tuvieron que lamentar graves daños. La alcaldesa de Son Servera, Natalia Troya, indicaba que «tras realizar un recorrido solo hemos visto mucha suciedad. La playa ha sido el punto más afectado y es por ello que ahora pedimos a Costas y a Medi Ambient que se autorice de manera urgente la regeneración de la playa según el proyecto que ya teníamos previsto». En la zona costera de Sant Llorenç, la situación es muy similar a la de Son Servera. Mateu Puigròs, alcalde de la localidad, señalaba que «debemos trabajar rápido para adecentar la playa».

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Manacor

En el municipio de Manacor, el núcleo de s?Illot fue el más afectado. El temporal marítimo provocó graves daños en algunas viviendas y espacios públicos, y la playa desapareció. El alcalde, Miquel Oliver, se acercó ayer hasta las zonas más afectadas y explicó que «en la primera línea de s?Illot los daños son importantes». Rocas y arena se acumularon en las calles y las casas de hasta tercera línea sufrieron daños, en una se vio muy afectado el tejado.

En Cala Marçal, en Felanitx, los propietarios de viviendas en primera línea analizaban los daños a la vez que procedían a limpiar los desperfectos ocasionados por las grandes olas. Allí, el delegado de Gobierno, Ramon Morey, señaló que se intentará ayudar a los municipios afectados con una ayuda del Gobierno, y para los particulares se deberá conocer si se califica la zona como catastrófica.

En Santanyí, el temporal afectó sobre todo al puerto de Cala Figuera, donde cuatro embarcaciones y un llaüt de siete metros se hundieron. También desperfectos en embarcaciones recreativas fueron las consecuencias más importantes del paso de la borrasca por el norte de la Isla. En Pollença, ayer fue día de trabajo para retirar los veleros varados en la costa. Se da el caso que muchos de los barcos afectados estaban fondeados de manera ilegal.

cala rajada.

Por otra parte, el conseller de Mobilitat i Infraestructures del Consell, Iván Sevillano, visitó ayer el punto de la carretera de Alaró a Orient que sufrió un desprendimiento de piedras el lunes. Anunció que las obras de emergencia comenzarán esta semana o la próxima como máximo. Tendrán un coste de unos 500.000 euros. El proyecto no solo prevé arreglar el talud afectado sino que también se arreglarán otros puntos de la vía. El resto de carreteras de Mallorca afectadas ya han sido abiertas.

En sa Pobla, los productores de patata respiran aliviados después de tres días en vilo por lo que pudiera suceder a sus cultivos. Todo parece indicar que las intensas lluvias y vientos no han afectado en demasía a los patatales.