La cooperativa de Sóller prevé procesar 50 toneladas de oliva de mesa

Se trata de aceituna verde destinada a su preparación y envasado como olives trencades, la primera de las tres formas de preparación que contempla la DO, con la que se inicia la temporada, y la primera en comercializarse ya que se trata de un producto que debe consumirse lo más fresco posible una vez el encurtido ha hecho su efecto. En la Cooperativa las primeras partidas se procesaron este miércoles de forma mecánica para su proceso en toneles, previo a su envasado.

La Cooperativa todavía tiene existencias de oliva verda sencera por lo que este año no preparará esta modalidad. La campaña de oliva blava, ya madura -otra forma de preparación muy apreciada- no comenzará hasta después de Navidad mientras que la de trencada continuará hasta principios o mediados de noviembre, según vaya la meteorología.

La entidad calcula que este año la cosecha de aceituna para su consumo directo «será solamente entre el 50 y el 60 por ciento de la de hace dos años». Sin embargo el 2017 la cosecha fue «excepcional» y solamente la cooperativa de Sóller procesó 90 toneladas por lo que la proporción que se espera para este año, aún siendo muy inferior, se acercará mucho a la de «un año normal, un buen año». La pasada temporada la producción fue en cambio «excepcionalmente mala» por lo que no sirve como referencia.

Este año la escasez de lluvias ha leído el efecto positivo de un fruto sano por la ausencia de mosca del olivo.