Cemex anunció el pasado otoño el cierre de la fábrica de cemento de Lloseta de la que dependen 98 puestos de trabajo directos y unos 150 indirectos.

TW
12

El plan de reindustrialización de Lloseta acordado entre el Govern, el Gobierno central y la cementera Cemex para compensar el cierre de la planta cementera y la consiguiente pérdida de puestos de trabajo, pasará factura al suelo rústico de Lloseta y también de Petra.

El sábado salieron a exposición pública los seis proyectos de reconversión industrial, entre ellos un proyecto pionero de transformación de energía renovable en hidrógeno que pasa por construir, además de una planta de hidrógeno en suelo industrial de Lloseta, dos parques fotovoltaicos que ocupan parte del suelo rústico de Lloseta y Petra, parques que tendrán una superficie de 78.500 y 52.002 metros cuadrados respectivamente.

En el caso de Lloseta se da además la circunstancia de que el suelo rústico en cuestión forma parte de un Àrea de Reconversión Territorial en la que el Pla Territorial de Mallorca obliga a intervenir para frenar el deterioro de la calidad ambiental y paisajística de la zona. En Petra, ocupa una finca rústica del Govern balear, Son Dalmau.

Se prevé que la fase de construcción del proyecto de energías renovables que lleva el nombre de Power to Green Hydrogen durará 30 meses, durante los cuales se llegarán a generar más de 70 puestos de trabajo. Una vez puesta en marcha las instalaciones estas funcionarán con una plantilla mucho menor: 11 puestos de trabajo.

El proyecto, que estará a exposición pública un mes, se tiene que enviar ahora a los ayuntamientos afectados que deberán informar sobre lo que este representará y cómo incidirá en sus municipios. Para que continúe el procedimiento, el informe de los ayuntamientos deberá ser favorable. También será preceptivo el informe del Consell insular, aún tratándose de un proyecto que goza de la consideración de ‘estratégico’, lo que permite agilizar los plazos y salvar algunas trabas urbanísticas y ambientales.

En total, el proyecto de reindustrialización CEMEX-Baleares contempla seis planes de actuación y promete crear entre 52 y 65 puestos de trabajo directos.

De ellos 11 corresponderían a la planta de hidrógeno; entre cuatro y seis al desarrollo de una planta de tratamiento de áridos en suelo industrial; entre 10 y 15 al desarrollo de una planta de producción de asfalto también en suelo industrial; entre 14 y 16 al desarrollo de un centro logístico para materiales de construcción en suelo industrial; y de 10 a 12 al proyecto de creación de una cooperativa de transporte integrada por extrabajadores de Cemex. Otros 3 a 5 empleos son para la creación de un centro de I+D+I.

La inversión superará en mucho los 41 millones de euros que anunciaron las administraciones y la empresa cementera a principios de año. Solo la construcción de la planta de hidrógeno contempla una inversión de 46,3 millones de euros. Muchas son las preguntas que quedan en estos momentos en el aire y sobre las que se tendrá que posicionar la administración, entre otras si la vieja fábrica de cemento deberá ser desmantelada al menos en parte, tras perder su uso original.