El consistorio 'inquer' articula su respuesta política a la iniciativa de la Delegación del Gobierno. | Maria Nadal

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El regidor de Cultura de Inca, Antoni Rodríguez, ha presentado esta mañana la línea de ayudas que se pone en marcha para fomentar el uso del catalán en los comercios de la ciudad. Es la primera vez que el Consistorio impulsa esta iniciativa y lo hace en clara respuesta al recurso que presentó la delegada del Gobierno, Maria Salom, a la misma ayuda que se da en Pollença desde hace 20 años.

«Aunque era una propuesta de legislatura, el tema de Pollença ha hecho que reactiváramos las ayudas y es nuestra respuesta política al recurso de Delegación de Gobierno. Lo único que lamento es no haberla puesto en marcha antes», según palabras del edil Rodríguez.

Está previsto que el nuevo reglamento se apruebe durante el pleno de este mes y que la línea de subvenciones entre en vigor a principios de agosto. Se trata de una partida de 3.000 euros que se destinará al cambio de rótulos al catalán de los comercios, las cartas de bares y restaurantes, documentos administrativos y actividad publicitaria.

«Aunque este año solo destinamos 3.000 euros de la partida de normalización lingüística, no descartamos ampliar la línea de ayudas de cara a los próximos años. Dependerá del número de solicitudes que se realicen», según el responsable de Cultura.

A pesar de que Rodríguez no esconde que se trata de una respuesta política al recurso de Salom también reconoce que «en Inca es muy necesaria la ayuda para fomentar el catalán porque la mayoría de rótulos de los comercios están en castellano». El edil espera que la iniciativa tenga una buena respuesta «porque aún no está en vigor y ya hemos recibido llamadas interesándose por el tema», afirma.

El regidor espera que esta iniciativa «sea un proyecto de futuro sea cual sea el color político que gobierne en Inca» y espera que «el nuevo delegado o delegada del Gobierno tenga otra sensibilidad con la lengua catalana». Cabe recordar que con la entrada del socialista Pedro Sánchez al frente del Ejecutivo español se nombrará un sustituto de la hasta ahora Delegada del Gobierno, Maria Salom.