El fuego, protagonista de uno de los actos más celebrados del Sant Antoni ‘murer’. | Miquel Àngel Borràs

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Muro vivió en la noche del sábado una doble celebración: la tradicional revetlla de Sant Antoni y el décimo aniversario de los Dimonis de sa Pedrera y su correfoc, uno de los actos más celebrados de la noche murera.

Ocho colles –la local, seis del resto de la Isla y otra venida expresamente de la ciudad catalana de Granollers– participaron en el correfoc. En conjunto, si se les añade los intérpretes de la banda de música, la batucada y los operarios que trabajan entre bastidores, cerca de 300 personas tuvieron un papel en el espectáculo. La fiesta culminó con el incendio de la iglesia parroquial (incluyendo el campanario) y el encendido del fogueró de la plaza.

La celebración al décimo aniversario estuvo también presente en el espectáculo. El pobler Antoni Gost ‘Curro’ leyó un poema sobre los diez años de trabajo de los Dimonis de sa Pedrera. Por otro lado, los Dimonis repartieron una obra de marès de Tòfol Sastre formada por 56 piezas entre las personas que de algún modo han colaborado con el espectáculo en este período. Cada una de las 56 piezas tiene un sentido individualmente; si se las ensambla, en su conjunto, cobran otro sentido.