Imagen de la marcha revindicativa organizada por Pro Camins Públics para reivindicar el libre paso por el Camí de Ternelles. | Teresa Ayuga

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El Ajuntament de Pollença registró este martes un recurso de casación contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de las Balears (TSJB) que el 16 de septiembre anuló el derecho público de paso del Camí de Ternelles al entender que entraba en contradicción con el Pla d'Ordenació dels Recursos Naturals (PORN) que cartografió como áreas de exclusión los últimos tramos de la vía que son el único acceso a Cala Castell y el Castell del Rei.

Aunque la sentencia del TSJB advertía que «no cabe ulterior recurso», el Ajuntament ha querido quemar un último cartucho ante el Supremo.

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El recurso de casación tiene dos apartados. Dedica el primero a justificar que es posible el recurso, entre otras cuestiones, porque anula una disposición de carácter general, más concretamente el Pla General d'Ordenació Urbana de Pollença. El segundo apartado defiende la idea de que el baño no está prohibido en aguas de Cala Castell sino en la ribera de costa, por lo que no se podría argumentar la imposibilidad de baño para justificar la anulación del paso público que se basa precisamente en una sentencia del Supremo que defiende la necesidad de abrir los caminos que conducen al mar.

La propiedad de Ternelles, a la espera de que el Supremo se pronuncie sobre el recurso de casación, ha anunciado su intención de no cerrar la finca y advierte de los riesgos de una rebaja de la protección medioambiental.