La joven afgana Nadia Ghulam. | Maria Nadal

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La joven afgana Nadia Ghulam, que estos días visita Inca de la mano de la propietaria de la librería Espirafocs Paula Valriu, recuerda a diario como fue su infancia en Afganistán y destaca que «en un país en guerra no hay derechos humanos».

Nadia Ghulam ofreció este jueves dos conferencias en el instituto de Binissalem y en el Berenguer d’Anoia de Inca donde explicó a los jóvenes su experiencia y les transmitió la cultura afgana más allá de la guerra y de las imágenes que llegan a través de los medios.

«A los once años decidí vestirme de hombre para poder ir a trabajar, porque en mi país no se permite trabajar a las mujeres. Esta situación duró diez años y me permitió conocer en primer persona como viven los hombres, que tampoco tienen una situación fácil», según cuenta la joven.

Pero insiste en que las desgracias «no siempre son negativas, también te pueden llevar a cosas positivas».

Ella llegó a España hace ocho años para recibir tratamiento médico y desde entonces vive en Barcelona con una familia de acogida que «son mis ángeles», dice.

Nadia viaja una vez al año a Afganistán para visitar a su familia, «aunque voy totalmente tapada por miedo a que puedan hacerme daño».

Está previsto que este viernes, Nadia Ghulam pronuncie una charla en el instituto Pau Casesnoves de Inca y por la tarde contará su experiencia en la librería Espirafocs de Inca.