Los camiones de la concesionaria trasladaron los escombros al punto verde de la ciudad.

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Cinco camiones llenos de colchones, muebles antiguos, televisores y restos de obra. Este es el resultado de las tareas de limpieza que se llevaron a cabo ayer en el casco urbano de Inca y que fueron denunciados por el Ajuntament de la ciudad.

El regidor de Servicios, Felip Jerez, quiso hacer ayer un llamamiento a la ciudadanía y destacó «el elevadísimo coste económico que tiene esta mala práctica por parte de algunos vecinos para las arcas municipales». Además, desde el Consistorio se recordó que la ordenanza municipal de residuos prevé multas que oscilan entre los 3.001 euros y los 10.000 euros para los que incumplan la normativa.

Gratis

Para evitar el vertido de este tipo de objetos que necesitan un tratamiento específico, el Ajuntament de la ciudad recuerda que dispone de un servicio gratuito de recogida de voluminosos a domicilio. «Los vecinos que así lo deseen pueden llamar de las 9.00 a las 15.00 horas y sacar sus trastos fuera de su casa los lunes y los viernes para que sean recogidos», según indicaron fuentes municipales.

El regidor Jerez añadió que «si el Ajuntament debe aumentar el número de operarios para este servicio se hará».

El problema de los vertidos incontrolados en la ciudad de Inca se produce tanto en el interior como en el exterior del casco urbano y el Consistorio ha puesto medidas para terminar con esta mala praxis.