La calle de Ca s’Hereu cumple los requisitos para que en un futuro pueda ser una ciclocalle. | Assumpta Bassa

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El Ajuntament de Son Servera estudia impulsar ciclocalles en algunas vías del centro de Cala Millor con el objetivo de potenciar el uso de la bicicleta, aumentar la seguridad de los peatones y sacar el tráfico fuera del casco urbano. Este sistema, que se ha implantado en otros lugares, cuenta con buenos resultados. El equipo de gobierno tiene sobre la mesa esta propuesta y ahora se analizará cuáles son las calles que serían aptas para llevar adelante esta iniciativa viaria.

Así lo explicó el alcalde, Antoni Servera, a este periódico. «Es una idea que ha surgido al ver cómo funcionan en otros lugares. Así, por ejemplo, en Vila-Real hay una red de ciclocalles muy amplia donde la velocidad máxima es de 30 kilómetros por hora. Aquí tienen prioridad las bicicletas. Creemos que en Cala Millor hay calles de único sentido que dan al paseo marítimo que serían susceptibles de convertirse en ciclocalles, con lo que se ganaría en seguridad».

Según explicó el alcalde, calles como Ca s’Hereu, Binicanella, na Penyal, podrían sufrir esta reconversión. «Son zonas donde no se aparca, donde acceden prácticamente los vecinos y se podría ganar en seguridad».

Desde el Ajuntament consideran que sería una propuesta muy interesante en el sentido de que «ya contamos con un carril bici que une la costa y añadir más calles sería fomentar todavía más el uso de la bicicleta. Además hay muchos lugares de alquileres y tendríamos las calles sin coches».

El alcalde comentó que «se trata de una propuesta que se tiene que discutir. También visitaremos in situ el funcionamiento de algunas que ya estén adaptadas y consultaremos con las asociaciones de ciclistas para hacer los itinerarios».

Esta nueva infraestructura viaria sería, en palabras de Servera, «una nueva apuesta por el medio ambiente». Además se puede ofrecer una alternativa a los turistas para emplear un medio de transporte ecológico.