El Consell d’Administració de Ports de les Illes Balears ha dado luz verde a las obras de remodelación de uno de los pantalanes del Club Nàutic de sa Rápita. Se trata de una obra que será sufragada íntegramente por el propio club y que tiene que servir para ganar superficie de amarre dentro de las instalaciones actuales del propio club del núcleo costero de Campos.
Las obras que se tienen que llevar a cabo consisten en la demolición de un pantalán de 48 metros para construir otro nuevo de 35 metros de longitud y en el que se sustituirán los actuales amarres de cuatro y seis metros de eslora por otros de 10 y 12 metros, respectivamente. Esta medida se debe, en parte, a que debido a la eliminación del actual pantalán los nuevos canales de maniobra que quedarán entre los pantalanes permiten el paso de este tipo de barcos de mayor tamaño. Además, según se ha informado, el canal navegable entre el nuevo pantalán y el contradique permitirá modificar en este último la eslora de los 15 primeros amarres pasando de ocho a 10 metros. Por tanto se trata de mejoras que ofrecerán el amarre de barcos de mayor magnitud.
Otra de las obras a las que el Consell d’Administració ha dado su visto bueno es para la incorporación de varios puestos de amarre de tráfico en el muelle de espera, en total serán 10 nuevos amarres en este muelle de tránsito y que se prevé tengan en los meses de junio y septiembre una ocupación cercana al 70 por ciento y del 90 por ciento en los meses de julio y agosto. Así las cosas, después de estos cambios, se prevé que las obras de remodelación que se lleven a cabo en Club Nàutic de sa Ràpita del pantalán la superficie total de amarre se incrementará en más de 580 metros cuadrados. Las obras implican un incremento del canon imputable al concesionario de 32.650 euros.
El Govern ha señalado que a la reunión del Consell d’Administració de Ports «el GOB no asistió por segundo año consecutivo».
2 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
Ahí, ahí, corrompiéndolo todo. Dinero, dinero, dinero, ..... Vaya unos esquizofrénicos de lo material y artificial. Eso es terrorismo medioambiental. Ya está bien de cargarse las islas.
Mayor eslora, mayor tonelaje, más basura y más estropicio. Recuerdo que, cuando todavía el Club Náutico de Sa Rápita no existía, la playa estaba muy limpia y el agua no lamía los búnqueres que aún existen. Ya entonces dije que con las obras que pensaban realizarse, las corrientes modifíarían la playa, tal vez de forma irreversible y, por desgracia no me equivoqué. Hoy ha desaparecido una considerable franja de arena, esperemos que alguien no tenga la "brillante idea" que tuvo un President, y que consistió en SACAR arena de fondos marinos, alterando un ecosistema muy frágil, y todo para que los "turistas" tengan donde posar sus esqueletos.