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Unos 400 religiosos y religiosas de la orden franciscana se reunieron ayer en Petra para celebrar el Día de la Vida Consagrada. Una festividad, la de la Candelera, que se lleva a cabo cada 2 de febrero y en la que la luz es la protagonista. El acto contó con la presencia del obispo de Mallorca Javier Salinas y del vicario general Lluc Riera.

En la iglesia de Sant Pere, Salinas bendijo las candelas en mano de los franciscanos que luego fueron portadas en procesión por las calles del pueblo hasta el Convent de Sant Bernardí. Una vez allí, el obispo y el vicario general oficiaron una emotiva misa concelebrada con todos los religiosos.

La visita del obispo en Petra también sirvió para que rindiera su homenaje a Fra Juníper Serra, a las puertas del Any Pare Serra 2013 que prevé multitud de actos para divulgar su obra como apóstol y civilizador de California.

Visita

Así, la comitiva fue recibida en el complejo de la casa natal y museo del Pare Serra por la alcaldesa de Petra, Caterina Mas, y por el presidente de la Associació d’Amics de Fra Juníper Serra, Bartomeu Bestard, quien hizo entrega al obispo de una estatua de bronce del propio Serra.

Salinas, además, firmó en el libro de visitas de la entidad y visitó todas las instalaciones.