TW
0

La bajada en picado de las temperaturas y el viento no fue impedimento para que miles de personas llenaran, ayer, las calles de Porreres para disfrutar de la Fira.

Pese a que a primera hora de la mañana sí se notó el ambiente frío, así como el reloj avanzaba las calles se llenaban de visitantes. De hecho, el cambio de tiempo era el principal tema de conversación que se podía escuchar entre la gente conocida que se encontraba dando una vuelta por la feria.

Varias paradas de venta de las flores típicas de este tiempo, nos anunciaban que en pocos días se celebrará la fiesta de Tots Sants y los cementerios se llenarán de estas flores. También se podían ver paradas de castañas asadas.

Muestra

En la plaza, los alumnos de la Escola de Música realizaron diferentes actuaciones. También había una muestra de coches y motos antiguas, así como una muestra de herramientas del campo que se pudo visitar en el patio del antiguo matadero.

Los visitantes también pudieron disfrutar de la muestra de productos locales o de la feria de la construcción montada en las inmediaciones del Molí de n'Amengual, un sector que, a pesar de la crisis económica, en Porreres todavía es potente y hay un buen número de empresas.