El Ajuntament apuesta por un cambio en la concesión del bar y la piscina. | M. MEDRANO

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Después que el concesionario que explota el bar y la piscina del polideportivo de Lloret interpusiera una denuncia contra el Ajuntament por incumplimiento de contrato, el equipo de gobierno (PP) decidió reunir a los vecinos el jueves en una asamblea para explicar la situación.

El alcalde, Joan Jaume, aseguró que «la concesión finalizó el 8 de mayo pero la empresa se negó a irse por lo que, avalados por técnicos, decidimos cambiar la cerradura de la instalación para que no pudiera acceder al recinto».

A raíz de la denuncia del concesionario, el juez ordenó la reapertura del polideportivo y dio de plazo hasta el 8 de septiembre al concesionario para continuar explotando las instalaciones. Jaume dijo que «aunque acataremos la decisión judicial, el Ajuntament la recurrirá».

Además, el alcalde añadió que «tenemos otra empresa interesada en hacerse cargo de la gestión del bar y de la piscina municipal, pero la actual concesionaria le pide 35.000 euros por el traspaso del bar y al Ajuntament otros 35.000 euros, aunque no haya pagado las facturas de luz ni el canon de alquiler de 200 euros al mes durante el último año».

Según explicó el alcalde, Joan Jaume, con la actual concesión «los vecinos de Lloret no acuden a las instalaciones del polideportivo y el objetivo del Ajuntament es volver a impulsar las instalaciones».

Escoleta

Por otra parte, durante la reunión del jueves con los vecinos, el equipo de gobierno también explicó su intención de que sea una empresa quién lleve la gestión del servicio. «El Ajuntament no puede mantener la escoleta que nos cuesta 40.000 euros por lo que apostamos por externalizar el servicio», dijo Jaume.