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Miles de ciudadanos acudieron ayer a los diferentes pancaritats que había por toda la geografía de Mallorca y que ponen el punto y final a semanas de fiesta. El tiempo acompañó y las diferentes ermitas y santuarios pudieron acoger a sus peregrinos en una lúdica jornada y sólo se tuvieron que lamentar algunas pequeñas gotas de lluvia que fueron las protagonistas durante pocos minutos alrededor de las cuatro de la tarde. Así, en Inca acudieron a Santa Magdalena; en Porreres, a Monti-sion, en Llucmajor hasta el Santuari de Gràcia y en Santa Maria del Camí, a la ermita de Son Seguí.

Inca

Cientos de personas llenaron durante toda la jornada de ayer el Puig de Santa Magdalena, donde la ciudad de Inca celebra cada año durante el Diumenge de l'Àngel su tradicional romería.
Este año llamó la atención el transporte de las grandes paellas que se cocinan (algunas para 500 personas) en un camión grúa hasta la zona recreativa. La entrada en vigor de la ley prohibía ayer hacer fuego en las zonas boscosas, por lo que las paellas se cocinaron en los altos del Puig y se tuvieron que transportar hasta donde se habían montado todas las mesas. Aún así, el transporte sirvió también como motivo de fiesta que no terminó hasta la tarde, cuando Revetlers del Puig d'Inca llevaron a cabo un demostración de baile popular.

Llucmajor

Unos 2.000 llucmajorers y llucmajoreres recorrieron a pie seis kilómetros, desde el pueblo hasta el Puig de Randa, para venerar a la Mare de Déu y disfrutar de una jornada festiva, con paella incluida, en el Santuari de Gràcia. Por segundo año consecutivo, los peregrinos subieron acompañados por los gigantes en Miquel y na Càndida. En s'Arenal, el Dimenge de l'Àngel comenzó a las 10,30 horas con una misa en la iglesia de la Mare de Déu de Lactància. A continuación se celebró la romería, que acompañó a la imagen de la Mare de Déu desde la iglesia hasta la zona del Pancaritat, donde se procedió a la colocación de la Virgen en su capilla y se cantó la Salve. También hubo una paella multitudinaria. En Badies, los vecinos subieron hasta es Pinaret.

Santa Maria

Los habitantes de Santa Maria del Camí celebraron el Diumenge de l'Àngel acompañados, como manda la tradición, por su vecinos de Santa Eugènia y Pòrtol, y todos juntos disfrutaron de una gran paella en la ermita de Son Seguí, uno de los parajes más excepcionales de la Isla. La ermita se encuentra en un lugar de difícil acceso y la mayoría de los vecinos que acudieron a celebrar el Pancaritat tuvieron que acceder a Son Seguí andando. Tanto sacrificio se vio recompensado por una gran comida de hermandad entre todos los asistentes.

Porreres

Centenares de vecinos de Porreres subieron hasta la cima de Monti-sion para acudir al tradicional Pancaritat del Diumenge de l'Àngel. Allí la jornada fue muy animada con actividades, bailes, la música de la Filharmònica, cuentacuentos y la misa con la participación de la coral que se celebró en el claustro del oratorio. La diada se alargó durante todo el día, ya que el tiempo acompañó.
Por la tarde, la Associació de Persones Majors organizó una torrada para finalizar la fiesta.