El pleno aprobó, sin los votos del PSOE, una moción en defensa del catalán. | G. Alonso

TW
3

El alcalde Antoni Pastor tendrá que pagar de su bolsillo 4.000 euros por el retraso en la presentación ante el juez del proyecto de demolición del puente del Riuet de Porto Cristo que tenía que se entregado el pasado 15 de octubre.

De hecho, el Ajuntament presentó día 15 de octubre el proyecto en su fase provisional a la espera de la redacción de seis informes técnicos que lo tenían que avalar. El juez, sin embargo, lo que ordenó fue la presentación del proyecto definitivo y por ello se han impuesto 1.000 euros quincenales, a razón de dos meses de retraso, para el alcalde hasta que no se presentara el plan definitivo.

A ello hay que añadir el agravante que mañana día 15 la sanción ya ascendía a 1.500 euros y un total de 5.500 euros.

Así, el pleno aprobó ayer y ante la falta de dos de los seis informes necesarios el proyecto definitivo de demolición del puente del Riuet que se ejecutará el 15 de enero.

En solitario

El hecho de que Pastor sea el responsable directo del caso, él en solitario asumió las consecuencias de la aprobación de este punto votando él en solitario y ante la abstención de todos los grupos políticos incluidos sus compañeros del PP y sus socios de AIPC.

Así, ayer mismo se registró este acuerdo de pleno donde se da fe del proyecto definitivo con el objetivo de evitar una nueva sanción para Pastor, dado que los plazos impuestos por el juez no pueden ser cumplidos por los técnicos del Ajuntament de Manacor.

El juez ya avisó de estas sanciones en su última sentencia ya que entendió una actitud manifiesta por parte del Ajuntament de retrasar los plazos para evitar la demolición de la infraestructura.

Por su parte, Pastor lamentó que «sin haber adjudicado ni haber ordenado la construcción de este puente, por el hecho de ser el actual alcalde tengo que responder con mi patrimonio estas sanciones impuestas por el juez».