En el actual contexto de crisis económica, el Ajuntament de Sant Llorenç ha adoptado una serie de medidas para favorecer la creación y el mantenimiento de puestos de trabajo, a la vez que reactivar la economía del municipio.
Ayer se aprobó en pleno extraordinario y urgente una bajada de impuestos (Impuesto de Bienes Inmuebles y de los recibos de la basura) a los hoteles, tiendas, bares, cafés y cafeterías del término. Una medida que fue calificada de «discriminatoria» por parte de la oposición en el sentido que «sólo se contempla la reducción para determinados sectores y no para toda la población».
Con esta medida anticrisis el Ajuntament dejará de ingresar en el 2010 un total de 600.000 euros. Estas medidas suponen la reducción de un 10% del recibo de la basura a los comercios del término; la introducción de una bonificación de 45 euros por tonelada a los sujetos pasivos que participen en los programas de recogida selectiva de la fracción orgánica y la reducción del tipo de gravamen a aplicar a los hoteleros que pasará de 0'8% a 0'7%.
En el 2008 los hoteleros fueron los grandes perjudicados por la subida del IBI. Por ello han pedido, con insistencia, una rebaja. El alcalde de Sant Llorenç, Mateu Puigrós, expuso que «hemos mantenido reuniones con los hoteleros y nos pidieron que reflexionáramos sobre la posibilidad de bajar el IBI. Se trata de uno de los sectores productivos más importantes del término. Por esto después de los estudios pertinentes se ha decidido rebajar el impuesto para incentivar los sectores más perjudicados».
Ayer desde la asociación hotelera no quisieron hacer ningún tipo de manifestaciones al respeto pero según ha podido saber este diario no están demasiado satisfechos.
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