El alcalde de Sóller, Josep Lluís Colom, ha asegurado que para los presupuestos municipales del 2010, el equipo de gobierno propondrá una reducción del sueldo de los componentes del Consistorio. La noticia llega dos días antes de que un pleno extraordinario apruebe la asignación que cobrará el alcalde por su dedicación exclusiva a la Alcaldía, y que asciende a 51.000 euros brutos anuales.
El alcalde socialista ha asegurado que «es la cantidad estipulada al principio de legislatura, pero se tiene que ratificar por pleno ya que ha habido relevo en la Alcaldía», y ha recordado que «desde que tomé posesión como primera vara no he cobrado». Colom hizo estas declaraciones después de que los sindicatos hayan convocado para el lunes a primera hora una asamblea de trabajadores para estudiar posibles acciones ante lo que consideran un importante recorte en las prestaciones sociales que tienen establecidas por convenio, entre los cuales hay ayudas para la adquisición de libros escolares y seguro médico.
En este sentido el alcalde se mustra tajante y asegura que «el convenio laboral sigue vigente y en estos momentos lo único que ha hecho el Pacte es abrir negociaciones con los representantes de los trabajadores para reconducir las prestaciones y otros aspectos como puedan ser los complementos y gratificaciones, así como los adelantos de caja». Colom admite que hay prestaciones «que puede ser que no se puedan dar ahora de forma transitoria por falta de liquidez, y éste es el tema que ahora hay sobre la mesa de negociaciones».
En todo caso, el equipo de gobierno empezará a aplicar un plan de austeridad de cara a los presupuestos de este año, todavía no aprobados por ahora, entre los cuales destacará la eliminación de los gastos de protocolo, la anulación de la mayoría de subvenciones a entidades deportivas y culturales o la drástica reducción del alumbrado de Navidad, entre otros.
En este último punto el alcalde y el concejal de cultura y fiestas, Guillem Bernat, se reunieron el martes con los comerciantes y les notificaron que éstos tendrán que correr con los gastos de instalación de la decoración navideña de cada calle, una medida que este año puede suponer un ahorro de unos 50.000 euros a las arcas municipales.
Los miembros del equipo de gobierno se reunieron hace unos días con el conseller de Economía, Carles Manera, para hablar del plan de saneamiento económico que el Ajuntament solicitó a Madrid.
Según el alcalde, «está claro que las condiciones de financiación que pedimos superan lo que contempla el Ministerio de Economía y por lo tanto se tendrán que buscar otras soluciones, y todas pasan por rebajar el gasto ordinario».
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