TW
0

Es una de las urbanizaciones más emblemáticas de Mallorca. Despegó con la construcción del hotel Formentor en 1929 y, poco a poco, la península de Formentor se fue poblando de grandes mansiones ocupadas por magnates de la época, diplomáticos, empresarios, millonarios, llegados de todos los países del mundo para disfrutar de unas vistas privilegiadas.

La reciente construcción con licencia de obra municipal del chalet del conocido empresario Alfonso Cortina y el proyecto de ampliación y reforma del hotel, vuelven a poner sobre la mesa la necesidad de disponer de un instrumento de ordenación que pueda frenar el impacto urbanístico en Formentor. Los expertos advierten que una vez el Ajuntament dé el visto bueno al proyecto de urbanización que ultiman ahora los vecinos se abre la vía, no solo a la edificación de las parcelas que aún permanecen vírgenes, sino también a posibles derribos y la sustitución de las edificaciones más antiguas por otras más modernas, podría ser que con mayor impacto.

Mientras los grupos ecologistas solicitan la desclasificación de este entorno declarado Paisaje Pintoresco, el Ajuntament analiza con lupa el proceso de constitución de la junta de compensación que permitirá (si se logra el acuerdo del 90 por ciento de los propietarios) desarrollar el resto de la urbanización clasificada como suelo urbano desde 1990. De no hacerlo tendría que hacer frente a indemnizaciones millonarias.

Desde que en 1929, Adam Diehl impulsara la construcción del hotel Formentor mucho ha cambiado la fisonomía de un paisaje que atrajo hasta la zona a conocidos actores y actrices de Hollywood como Gary Cooper, Grace Kelly, Lawrence Oliver... Ahora, los inquilinos son empresarios como Fuxa o Cortina o diplomáticos. Fueron los propietarios del hotel los que en 1930 abrieron el proceso de parcelación de la península, vendiendo las primeras fincas.

Hasta el año 1991 no existía un plan de ordenación de la península de Formentor y, no obstante, el Plan General de Ordenación Urbana de Pollença califica por primera vez en esa fecha el suelo de Formentor como urbano, basándose en criterios de consolidación al tener edificada un 60 por ciento de su superficie, aunque sigue careciendo de servicios básicos. No fijaba limitación máxima del volumen de las construcciones ni aplicaba de criterios ambientales.

En mayo del 94, una modificación puntual de la normativa propuesta por el arquitecto municipal, Jaume Carbonero (hoy conseller d'Obres Públiques del Govern) permite, pese a la normativa del 91, conceder licencias de obra a partir de esa fecha sin proyecto de compensación ni de urbanización aprobado. Nunca se cedieron al Ajuntament los viales y zonas verdes que había incorporado a la urbanización el PGOU. Desde entonces hasta la fecha se han construido aproximadamente 8 viviendas más.

La última modificación de la normativa urbanística vigente desde mayo de 2008 condiciona la ampliación del hotel a la previa dotación de servicios de la urbanización. Introduce por primera vez criterios medioambientales, suprime la vivienda de servicio permitida hasta entonces y limita el volumen máximo edificable por parcela a 2.100 metros cúbicos.

El Ajuntament de Pollença trabaja ahora en la aprobación de una nueva modificación puntual del planeamiento, aún por definir, que pueda preservar la fisonomía tradicional de esta urbanización.