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El comité local de Unió Mallorquina de Sant Joan se desmarcó ayer de la polémica que se ha desatado en el pueblo a raíz del enfrentamiento entre el Pare Josep Estelrich y el cura castrense Jesús Honduvilla.

Desde la agrupación lo tienen claro: «Queremos que los ataques a don Josep Estelrich y el conflicto que se vive en la iglesia acaben, y si los implicados deben continuar con su enfrentamiento, que lo hagan en los juzgados, no en las revistas, en los diarios o en la parroquia».

Así lo declaraba sin tapujos el presidente de la junta local, Guillem Galmés. Un Galmés que también quiso dejar muy claro que la actual alcaldesa, Maria Teresa Munar, no forma parte del comité local. En este contexto, fuentes de Unió Mallorquina han explicado a este diario que la alcaldesa habría tomado parte en el conflicto en favor de Honduvilla influenciada por su amistad con Maria Gemma Pascual. Ambas han desmentido esta afirmación aunque se declaran amigas.

El conflicto que enfrenta a Pascual con el cura Estelrich se ha podido seguir a través de los artículos publicados por la misma Pascual en la revista local Damunt Damunt. «En ellos defiendo mi posición y afirmo que en Sant Joan no se puede hacer cultura», explicó su autora.

Por su parte Josep Estelrich ha declinado hacer ningún tipo de declaración, aunque personas de su entorno familiar sí que han informado que «Gemma Pascual y el padre Estelrich hace años que no tienen una buena relación, aunque nunca se había llegado tan lejos».

Por su parte, Pascual reconoce que es amiga del cura Jesús Honduvilla, «pero no vivimos juntos, yo vivo en Palma», añade. Según su parecer «lo que pasa es que Estelrich no aguanta que una mujer esté al frente de ninguna institución importante».