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J.ROSSELLÓ Vecinos, comerciantes y turistas están indignados con las obras de sustitución del adoquinado que se llevan a cabo en el núcleo turístico de Peguera. El malestar es más patente entre los comerciantes del bulevar, sobre todo porque tenían el compromiso del Consistorio de acabar las obras en el mes de enero. Ése fue el acuerdo que se alcanzó con Cristina de León, delegada de Peguera, y José Morell, jefe de Vías y Obras, en las diferentes reuniones que mantuvieron con los afectados por las obras.

Los plazos no se cumplieron al iniciarse las obras con un mes de retraso. De esta forma, las obras que tenían que haber concluido en enero aún se están ejecutando, causando importantes perjuicios a los comerciantes afectados. Además, en febrero varios hoteles de Peguera comienzan a abrir sus puertas. Y, este año, los turistas se han encontrado con unas molestas obras.

Las obras consisten en la sustitución del adoquinado del bulevar por hormigón estampado. Además, en segunda línea se produce al arreglo de redes pluviales.

Para PSOE y UM, es una «irresponsabilidad» ejecutar obras que afectarán negativamente a la temporada turística. Ambas formaciones políticas coinciden en que el Ajuntament debe indemnizar a los propietarios de comercios, bares y restaurantes. UM, por su parte, concreta que se les debería beneficiar con exenciones fiscales.

El PSOE destaca que «en época de crisis es cuando más se debe cuidar a los turistas».