Los Ajuntaments de Son Servera y Sant Llorenç reclamarán a la Demarcación de Costas la demolición del edificio de la Cruz Roja de Cala Millor ubicado sobre la playa, a primera línea del paseo marítimo, en el punto donde marca la separación de ambos municipios.
La situación entorno a este polémico edificio ha dado un importante vuelco puesto que existe un proyecto de reforma adjudicado desde hace más de un año, fruto de un convenio entre ambos consistorios y la conselleria de Turismo de principios del año 2004.
Ahora se ha dado marcha atrás y se pide la paralización de este proyecto que ascendía a 240.976 euros y que contemplaba la reconversión del edificio del antiguo edificio de la Cruz Roja en un local para baños públicos, una oficina de información turística y el puesto de la Guardia Civil.
«El objetivo es eliminar cemento de la playa y retranquear el paseo para en el futuro recuperar el sistema dunar. También se persigue poder conseguir la bandera azul de Cala Millor que año tras año queda pendiente» , exponía el alcalde de Son Servera, Josep Barrientos.
La propuesta de solicitud de demolición arranca del Ajuntament de Son Servera y cuenta con el apoyo del de Sant Llorenç. Mañana, el pleno de Son Servera debatirá una moción instando a Costas a la demolición del edificio. Posteriormente se llevará a pleno en Sant Llorenç.
Hay que decir que ambos municipios también están de acuerdo en que en este lugar se podrían hacer unos baños públicos, una de las viejas reivindicaciones de ambos ayuntamientos.
Este edificio se construyó en 1977 y se destinó a servicios prestados por la Cruz Roja durante casi 20 años. Últimamente se utiliza como oficina de temporada de la Guardia Civil y para los socorristas.
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