Isabel y Bartolomé Miquel presentaron ayer una denuncia en el Ajuntament por el mal servicio de la residencia.

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La Conselleria d'Afers Socials, Promoció i Inmigració del Govern ha paralizado la entrada de nuevos usuarios en la recién estrenada residencia de Crist Rei de Inca hasta que se subsanen todas las deficiencias del centro. En este aspecto, la consellera Josefina Santiago, manifestó que «como medida preventiva hemos decidido parar la orden de entrada de nuevos usuarios al centro y si en un plazo corto no se arreglan todas las deficiencias cerraremos el centro».

El mayor problema de la residencia de Crist Rei es que funciona con un generador que no da la suficiente energía para poder dar salida a todos los servicios necesarios como la lavandería, que sólo funciona una hora al día, y la climatización, entre otros. La puesta en marcha del generador se empezó después que los técnicos de la Conselleria d'Indústria del Govern visitaran la residencia y comprobaran que no se disponía del final de obra y que estaban conectados directamente en la red pública «lo que provocó un gran apagón en la zona de Crist Rei», según aseguró la portavoz del Bloc en Inca y consellera d'Indústria, Xisca Vives.

La consellera Santiago explicó que «cuando entramos en el Govern inspeccionamos todas las residencias que gestionamos o co-gestionamos y nos dimos cuenta que a la residencia de Crist Rei de Inca, que se inauguró durante el pasado mes de enero, le faltan todas las licencias, la autorización sanitaria y el final de obra. Por no tener, no disponen ni de la autorización del inicio de funcionamiento».

En este aspecto, Santiago dijo que «el mayor problema de esta residencia es que ya hay residentes dentro y nos pusimos en contacto con la empresa que gestiona la residencia y nos aseguraron que habían tenido presiones políticas para abrir la residencia lo antes posible».

Ahora, la Conselleria d'Afers Socials, ha dado un plazo corto a la empresa y al Ajuntament para subsanar las deficiencias y si no se arreglan se cerrará. Josefina Santiago anunció ayer que «si finalmente tenemos que cerrar la residencia de Crist Rei, desde la Conselleria se darán unas ayudas a los familiares de los internos para poder pagar sus servicios necesarios o se trasladarán a otro centro».