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LL.GARCIA
Unos cincuenta vecinos de la urbanización Morell-Oleza, situada en la segunda línea del Port de Sóller, cortaron ayer temporalmente la circulación de la calle Xaloc que pasa por esta urbanización para protestar por el hecho que esta estrecha calle se haya convertido en la única vía de acceso y salida de la zona portuaria a raíz de la reforma circulatoria que el Ajuntament de Sóller ha aplicado desde la apertura del túnel de Sa Mola.

Los vecinos de la urbanización, que tiene casi medio siglo de existencia y no está dotada de servicios completos, protestaron de forma simbólica pero enérgica cortando la circulación durante unos minutos, los suficientes para que se presentaran dos patrullas de la Policía Local y les instaran a dejar libre la «vía pública».

Según Jaume Ensenyat, presidente de la asociación que reúne a un centenar de vecinos «el Ajuntament ha actuado con prepotencia sin tener en cuenta que esta calle por la que ha desviado todo el tráfico en doble circulación, pertenece a una urbanización privada». Ensenyat se encaró a los agentes de la Policía Local afirmando que «no tienen derecho a estar aquí, porque estamos dentro de nuestra casa».