La ubicación del complejo era privilegida. Foto: MICHELS

TW
0

MICHELS/C.R.G.
El Ministerio de Medio Ambiente, a través de la Dirección General de Costas, ha ordenado el derribo de las instalaciones ilegales del mítico Mola Club, en el Port d'Andratx, ahora totalmente abandonado. Costas remitirá el próximo lunes un escrito a la propiedad dándole un plazo de 30 días para iniciar la demolición. Y si no la ejecuta, la administración iniciará el derribo con carácter subsidiario. Es decir, después pasará la factura a los dueños.

El coste de la demolición, según explicaron fuentes del Ministerio a este diario, ascenderá a 500.000 euros. Este presupuesto incluye la demolición, el transporte de los escombros, así como la reposición de los terrenos a su estado natural.

Mola Club se construyó hace más de 30 años en zona de dominio público marítimo-terrestre infringiendo de forma fragrante la Ley de Costas. De hecho, se trata de una «invasión histórica» de la costa, según lo calificaron en Demarcación de Costa de Balears. El expediente de demolición data de los años 90, pero se tramitó mal en la notificación y el expediente tuvo que volver a iniciarse de nuevo.

Ubicado en Cala Marmacen, Mola Club es propiedad de la familia Bascones. El arquitecto del complejo turístico fue Pedro Schultz y albergó varios bungalofs, un restaurante, una gran piscina y otras tantas más pequeñas encima del mar, así como un chiringuito. De hecho, fue uno de los enclaves más emblemáticos y más visitado de la costa andritxola en los años 80.

Además, existía un funicular para subir y bajar del complejo. Ahora, las instalaciones de la Gola Club, enclavadas en un lugar privilegiado del litoral, llevan de cinco años cerradas y se encuentra en un estado bastante deteriorado.

El objetivo es iniciar la demolición lo antes posible.