Sa Pobla vivió ayer uno de sus días más entrañables con la celebración de la Fira de Tardor que este año ha estado dedicada al fantástico mundo de las rondalles. Después de la inauguración del sábado de la Fira y del desfile de los personajes de las rondalles, ayer las calles más céntricas se vistieron de gala recordando la época medieval.
Miles de personas recorrieron los diferentes expositores buscando lo más original. Uno de los expositores que llamó más la atención de los visitantes fue un vendedor que ofrecía todo tipo de hierbas para hacer infusiones que curaban cualquier mal, como la tos, los nervios, la depresión o los mareos.
Además de recorrer la Fira, la gente que se acercó ayer hasta sa Pobla no quiso perderse la espléndida decoración que se montó en la Plaça Major. A parte del Castell d'Aniràs i no Tornaràs, se expusieron todas las figuras de las rondalles. Por otra parte, durante el sábado por la noche mucha gente ya se acercó hasta sa Pobla donde se vivió un gran ambiente, aunque hubo el inconveniente de apagones intermitentes de luz.
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