Vecinos de Calas de Mallorca toman el Ajuntament de Manacor a golpe de silbato

Los vecinos se manifestaron para denunciar las deficiencias y el mal estado de la urbanización y exigieron su recepción. Foto: G.M.

09/05/06 0:00

GUILLEM MAS
Más de un centenar de vecinos de Calas de Mallorca tomaron ayer el Ajuntament de Manacor, silbato en boca, ante la negativa del Consistorio a recepcionar la urbanización, aprovechando los momentos previos a la celebración del pleno ordinario previsto para las nueve de la noche de ayer. Bajo el lema «Ven y ayúdanos a conseguir un pueblo digno», los manifestantes fueron convocados por la Asociación de Propietarios de Calas de Mallorca, la Asociación Hotelera de la zona y la Asociación de Vecinos. Éstos reivindicaron la recepción de la urbanización, tras cuarenta años de su construcción, denunciando y poniendo de relieve el estado precario y deficiente de todas sus infraestructuras, zonas verdes y viales. Algunos comerciantes también expresaron su preocupación ante las pérdidas económicas que supone en sus negocios tal situación. «Nos manifestamos contra todos los partidos, ya que el alcalde les ha hecho una oferta y la oposición no ha querido llegar a un acuerdo», afirmó uno de los organizadores.

Portando pancartas con lemas como «Calas zona de interés turístico es un barco a la deriva», «Calas - Recaudar + Invertir» o «De Calas sólo os importan los votos», así como iban llegando los regidores al Ajuntament el ambiente se iba caldeando. Y llegó el alcalde Pastor que fue recibido con una sonora pita. Pastor, escaleras arriba hacia el salón de plenos fue perseguido por los manifestantes que llenaron la sala.

En el punto segundo del orden del día la regidora Júlia Roman (PSOE) presentó una enmienda oral por vía de urgencia en el punto de modificaciones de crédito, para exigir al alcalde que los remantes del presupuesto, que ascienden a 13 millones, se destinen a inversiones en Calas. Pastor arremetió contra la socialista acusándola de no presentar la enmienda por escrito y tachándola de «irresponsable». Así, se entró en un agrio debate con intercambio de reproches. En un acto de soberbia, Pastor retó a la oposición a votar por vía de urgencia una moción para recepcionar Calas para dejar claro ante los vecinos las diferentes posturas. La moción no se presentó ante el rechazo de la oposición.