Finalmente y casi in extremis hubo acuerdo. La sangre no llegó al
río. El tripartito (PSOE, UM y EU-EV) continuará, de momento, al
frente del gobierno municipal de Artà. Así se decidió en la
comisión de seguimiento del pacto, ayer por la noche, en medio de
un ambiente tenso en el que finalmente hubo consenso. Ahora bien
sólo en uno de los temas a debatir. La problemática de los sueldos
quedó sobre la mesa a la espera de nuevas propuestas. Unió
Mallorquina solicitó la reunión de la comisión de seguimiento del
pacto con el objetivo de encontrar una solución a la nueva crisis
desatada en el seno del tripartito. Crisis en una doble
dirección.
Por un lado se contemplaba la posibilidad de que el edil de
EU-EV, Julen Adrián, al frente del área de educación, no fuera el
representante municipal en los consejos escolares dada una serie de
divergencias surgidas primero en el Instituto y luego en el colegio
de Na Caragol. Adrián advirtió a la alcaldesa, Maria Francisca
Servera, que ésta era una de las competencias que le correspondían
a su área y que por tanto dejarlo al margen suponía una ruptura de
lo pactado.
Ayer, después de un intenso debate, se acordó que Adrián
seguiría al frente de los Consejos escolares de Na Caragol y del
colegio de Sa Colònia pero no del Instituto por decisión del propio
Adrián. Asimismo se acordó que cualquier decisión que se tomara en
este sentido se debatiría entre los diferentes partidos. Pero la
crisis también va en otra dirección. UM y el PSOE no se ponen de
acuerdo en el tema de los sueldos a cobrar tras el cambio de
alcaldía del pasado 1 de diciembre. Según ha podido saber este
periódico, UM no es favorable a que el PSOE ostente dos sueldos,
uno para la alcaldesa y el otro para Josep Silva. Así consideran
que sólo hay que pagar un sueldo y lo más lógico seria que fuera
para la alcaldesa. No hubo acuerdo y quedaron emplazados para otra
reunión con nuevas propuestas.
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