Han sido los primeros en manifestarse pero todo indica que la
rebelión puede extenderse a otros colegios. Los padres y madres de
alumnos del colegio de educación infantil Antoni Maura de Manacor
salieron ayer a la calle para protestar por la masificación de las
aulas que padecen los alumnos y personal docente. Un problema que
hasta ahora sólo habían denunciado públicamente los partidos de la
oposición y que es una constante en la mayoría de los colegios de
la capital del Llevant. Unas 200 personas entre padres, madres y
alumnos salieron a las dos de la tarde esgrimiendo pancartas entre
un estruendo de cacerolas, tambores y pitos y tomaron el paseo de
Na Camel·la. Los mensajes de las pancartas eran claros:
«Necesitamos más espacio», «Manacor se merece una educación digna»,
«Queremos una enseñanza de calidad», «Parad el aumento de ratios» o
«Estamos estrechos».
En un comunicado, la APIMA explica que, según la ley de
educación infantil, «corresponde una sala para cada unidad, con una
superficie de dos metros cuadrados por alumno y que tendrá al menos
30 metros y un ratio de 25 alumnos». En este sentido explican que
«de las siete aulas de nuestra escuela sólo una cumple estas
normas». El presidente de la asociación, Antoni Febrer, añadió que
los alumnos «parecen ovejas, no se pueden mover ni hay medios ni
profesores de apoyo o auxiliares para alumnos con necesidades».
Ante esta situación, solicitan que «detengan las subidas de los
ratios de nuestro colegio», la «construcción de un nuevo centro» y,
ante la potencial llegada de nuevos alumnos en lo que resta de
curso, piden que «el Ajuntament y la Conselleria d'Educació busquen
y adquieran unos locales para poder escolarizar los niños que se
tengan que incorporar a partir de ahora». Si la administración no
atiende a las reclamaciones, la acción reivindicativa de ayer no
será la última. Las Apimas de todos los colegios de Manacor
celebrarán en breve una reunión para tomar medidas. Entre ellas, no
se descarta una gran manifestación conjunta ante el Ajuntament de
Manacor. Recordar así mismo, que el pasado pleno rechazó una
alegación de ALM-UM mediante la que este partido reclamaba al pacto
que «priorizara las necesidades» y cediera a la Conselleria
d'Educació los terrenos donde está previsto construir el auditorio.
«Este terreno está a punto de cesión mientras que si se buscan
otros pasará mucho tiempo hasta que estén recalificados y se hayan
hecho todos los trámites burocráticos para poderlos ceder», afirmó
Miquel Àngel Grimalt.
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