El municipio de Artà ya cuenta con un nuevo y moderno edificio que
alberga el centro de día tras muchos años de espera. La primera
iniciativa se gestó en el 98. Pero fue en 2000 cuando se puso en
marcha el proyecto que tras haber pasado por una serie de
vicisitudes ayer se inauguraba oficialmente la primera fase que
acogerá un total de 15 mayores. Una vez finalizada, la segunda
fase, tendrá una capacidad para acoger un total de 20 usuarios.
Hasta el momento, la residencia acogía el centro de día, un
servicio con ocho usuarios. Ahora, éstos utilizarán las nuevas
dependencias de este centro de día.
El servicio va dirigido a personas mayores que viven solas o con
sus familiares y que presentan un grado de dependencia física,
psíquica o social, que les dificulta la realización de las
actividades de la vida diaria. Prevalece la atención a las personas
enfermas de Alzheimer y otras demencias.
El objetivo del centro de día es facilitar un entorno
compensatorio al hogar, adecuado a las necesidades de asistencia de
los mayores, hacer posible el mantenimiento del máximo grado de
autonomía personal y proporcionar una ayuda a las familias que
cuidan de los mayores.
Asistieron a la inauguración la consellera de Presidencia, Rosa
Puig; el alcalde de Artà, Rafel Gili junto a otros miembros de la
corporación local. La Conselleria ha aportado una subvención de
144.286 euros. Tanto el alcalde como el regidor de Servicios
Sociales, Julen Adrián, aprovecharon para pedir a la consellera
Rosa Puig una subvención para acabar la segunda fase. El centro
contará con una plantilla de dos auxiliares de enfermería, una
trabajadora familiar, una enfermera, un fisioterapeuta y el
director del servicio.
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