Durante la misma visita, fuentes de la Conselleria informaron
que las obras de las dos variantes llevan retraso de unos meses. En
el caso de Manacor, está previsto que la nueva vía se abra al
tráfico durante los últimos días de noviembre o primeros de
diciembre. En cambio, la variante de Sant Llorenç no se inaugurará
hasta principios del próximo año 2006.
A su vez, Matas informó que gracias a las dos nuevas variantes
se solucionará «el problema de la dificultad de comunicación de los
pueblos de la comarca con la ciudad de Palma», ya que a estas obras
se deben añadir el desdoblamiento la carretera de Manacor y la
variante de Son Ferriol, obras aún en ejecución.
El alcalde de Manacor, Antoni Pastor, informó que el Consell
tiene previsto un proyecto para unir la variante con el Hospital a
través de la carretera de Conilles.
Por su parte, la consellera Mabel Cabrer aseguró que «durante el
mes de junio del próximo año se habrán terminado todas las obras en
las carreteras de Mallorca y habremos conseguido poner las
infraestructuras viarias al nivel que les corresponde».
Mateu Puigròs se mostró satisfecho por el resultado de las obras
sobre todo porque «se ha conservado el puente del tren y se ha
resuelto la problemática sufrida en la carretera de Son
Carrió».
Las obras de Manacor consisten en la ejecución de una ronda que
discurre por el norte de la ciudad. De esta manera se elimina el
tráfico de paso por dentro de Manacor y se mejorará el nivel de
servicio de la carretera. El presupuesto total para esta obra es de
8.806.293 euros.
En Sant Llorenç, la nueva vía es una ronda que rodea el pueblo y
da continuidad a la carretera de Manacor con el objetivo de evitar
los riesgos que supone la entrada de toda la circulación que no
tiene como punto final el núcleo urbano. El presupuesto es de
9.775.000 euros.
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