En mayo de 1999, el alcalde de Campos, regidor de Urbanismo y
diputado del Parlament de les Illes Balears, epopular Andreu
Prohens, solicitó y se concedió una licencia municipal de obras
para cambiar el tejado de la entonces ruinosa casa que posee en una
parcela de la finca de Son Fullana. Sin embargo, tras firmarse y
sellarse el permiso, Prohens no sólo cambió la cubierta del antiguo
caserón sino que prolongó en unos 20 metros un porche que existía
en la parte posterior de la casa ampliando así la superficie de la
vivienda y sobrepasando la alineación de la edificación
primigenia.
Pero la ampliación de la casa levantada en 1930, en la parcela
número 667, del polígono numero 18 de Campos no acaba en la
construcción de los amplios porches que actualmente dan sombra al
primer edil en estos fogosos días preestivales. Anexo a la fachada
oeste de la vivienda, a escasísimos metros de la carretera de sa
Barrala (PMV603-1) y con la misma licencia municipal de obras para
cambiar el tejado de la casa, Prohens, juez y parte en todo este
asunto, mandó convertir un pequeño cobertizo en un amplio garaje
con capacidad para varios vehículos.
No obstante, antes de lanzarse a nadar en las procelosas aguas
de la urbanización en suelo rústico, el primer edil quiso salvar la
ropa poniéndose en contacto con el Consell de Mallorca a través de
la Comissió de Medi Ambient i Ordenació de Territori. A través de
su esposa y copropietaria de las parcelas, Prohens comunicó a la
mencionada institución supramunicipal su intención de cambiar las
cubiertas del inmueble según el proyecto redactado por su
arquitecto.
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