Cincuenta niños de primer y segundo curso del colegio público Puig
de sa Ginesta, en la urbanización Galatzó, regresaron ayer a sus
dos aulas después de que el pasado mes de noviembre quedaran
calcinadas en un importante incendio.
Desde entonces, los alumnos han recibido las clases en la
biblioteca del centro y en una sala destinada principalmente a
inglés y laboratorio. Una vez concluidas las obras de reforma, las
dos aulas han podido acoger de nuevo a los 50 niños.
El teniente de alcalde y delegado de Educación, José Manuel
Ruiz, asistió ayer por la mañana a la reapertura de las aulas. El
concejal inspeccionó las nuevas aulas en compañía del director del
centro escolar, Miquel Herrera.
Las obras de reforma han sido sufragadas por el Ajuntament y el
mobiliario ha sido repuesto por la Conselleria d'Educació del
Govern de les Illes Balears, según ha informado el Consistorio.
Satisfacción
El director del colegio público Puig de sa Ginesta ha mostrado su
satisfacción por las obras realizadas y ha destacado que desde que
ocurrió el incidente existe una mayor presencia policial.
Los niños del colegio también se vieron contentos con el regreso
a sus aulas que debieron abandonar a finales del año pasado por un
incendio.
Desde entonces, se ha procedido al arreglo de las aulas que ayer
ya estaban listas para acoger a los alumnos del centro escolar.
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