TW
0

El conseller d'Obres Públiques, Francesc Quetglas, anunció ayer que el proyecto del desdoblamiento de la carretera entre Palmanova (donde acaba la actual autopista de Ponent) y Peguera ya ha sido remitido al Consell de Mallorca para que éste informe a su favor, lo someta a información pública y posteriormente ejecute las obras. Además, Quetglas recordó que esta obra «está perfectamente descrita» en el convenio de carreteras suscrito en su día con el Gobierno central, por lo que consideró necesario volver a insistir en Madrid para que financie esta obra cuyas obras «podrían ponerse en marcha en 2003».

En términos similares se pronunció la presidenta del Consell, Maria Antònia Munar, quien lamentó que «Mallorca ha crecido mucho en número de habitantes y construcción, pero no en infraestructuras». En este sentido, reivindicó como había hecho Quetglas unos minutos antes, «la necesidad de que las Administraciones Públicas se unan para reivindicar el dinero que se va para no regresar». «Se ha hecho más publicidad que recursos han llegado» desde Madrid, dijo Munar en alusión al convenio de carreteras.

Las declaraciones de Munar y Quetglas fueron realizadas tras la inauguración oficial, esta vez sí, del nuevo enlace viario de Santa Ponça, junto al molino, que incluye un paso inferior de la carretera Palma-Port d'Andratx y una rotonda elevada cuya construcción ha costado cuatro millones de euros. Esta obra pone fin a un cuello de botella que hasta ahora provocaba numerosas retenciones.