El Ajuntament de Lloret pedirá al Obispado de Mallorca que ceda
temporalmente o done al pueblo el complejo religioso integrado por
el antiguo convento de las monjas y por las Cases dels Tarongers.
El equipo de gobierno popular llevará al pleno de hoy esta
propuesta motivada por el deficitario mantenimiento que presentan
unas construcciones protegidas por la normativa urbanística.
Esta iniciativa se pone en marcha después de que hace casi un
mes se derrumbara el muro trasero que cercaba el convento. Desde
entonces el Obispado no ha realizado ningún tipo de intervención de
urgencia, hecho que preocupa de forma especial a los responsables
municipales. La nueva propuesta de negociar la cesión de los
inmuebles surge precisamente del abandono de los inmuebles que ha
denunciado en diferentes ocasiones el Consistorio.
El conjunto histórico del siglo XVII está integrado por las
edificaciones de que antiguamente formaban el convento de los
Franciscanos y después de los Dominicos. El complejo incluye el
viejo convento de las monjas de clausura y las conocidas Casas dels
Tarongers. El primer edificio se encuentra cerrado desde que las
monjas marcharan hace un año y medio. Las cases dels tarongers son
utilizadas en parte por el Ajuntament pero también son propiedad
del Obispado.
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