TW
0

«Por las noches tenemos que colocar toallas bajo las puertas y cerrar las ventanas a causa de los malos olores y gases que provienen del vertedero de Son Coletes y no nos dejan dormir», explica Maria Adrover, una mujer que vive cerca del citado vertedero.

Lo que más indigna a los vecinos es que «hemos ido en varias ocasiones a protestar al Ajuntament pero no hacen nada para solucionar el problema; en la delegación de Medi Ambient nos dijeron: no sois la primera ni la última que vendrá a quejarse», explica Adrover.

Los vecinos aseguran que estos gases y hedores son consecuencia directa de cuando a finales del año pasado se quemó el vertedero. «Creemos que los residuos quemados, unidos a las fuertes lluvias de este verano ha provocado los gases», explican.